Su director, José Manuel Murillo, nos cuenta desde dentro las novedades de esta VI edición de la obra de teatro popular que, cada cuatro años, se representa en Hinojosa 

Cada cuatro años, Hinojosa del Duque se traslada a finales del medievo. La plaza de la Catedral luce imponente con pendones, llenándose de vaqueras, heraldos, pecheros, villanas, nobles, caballistas… Pero, antes de ello, de técnicos, carpinteros, pintores, electricistas, actores ensayando… Hinojosa es un auténtico hervidero de gentes que se vuelcan con uno de los grandes acontecimientos culturales de su pueblo y es que este jueves, 31 de julio, a las 22.00h, verá la luz la VI edición de “La Vaquera de la Finojosa”.

La obra, que será más Hinojoseña que nunca contando incluso con un director local, mueve a más de 250 participantes de manera directa e involucra, de un modo u otro, a toda la localidad de Hinojosa. José Manuel Murillo es quien lleva la batuta, pero bajo sus directrices vemos todo un pueblo implicado y al que sólo mueve una cosa, la ilusión. Algo que, sin duda, es en los ojos del director, sumido en un ir y venir de esos en los que cada paso soluciona un sinfín de pequeñas cosas, en los que más brilla estos días.

 
Has participado en todas las anteriores ediciones de la obra pero siempre desde la parte técnica. ¿Qué ha supuesto para ti el salto a la dirección? Para mí ser el nuevo director es toda una satisfacción, un gran orgullo. Porque hoy por hoy todo el mundo conoce ‘La Vaquera’, así que es una gran satisfacción personal estar al frente del proyecto.  Había hecho mucho teatro en diferentes grupos amateurs en Hinojosa y eso me ha llevado a saber de quién debía acompañarme en este proyecto. Y es que, como se suele decir, sabio no es el que todo lo sabe, sino el que tiene constancia de lo que no conoce. Es decir, el que sabe de quién debe rodearse. Por ello, no puedo sino agradecer al ayudante de dirección y adaptador del texto, Antonio Javier Cortés, al director y compositor musical Miguel Cerro, al diseñador de vestuario, Francisco Tamaral, al director de arte, Juan Andrés Molero y a la coreógrafa, Manuela Chaves, porque gracias a todos ellos y su trabajo la obra ha ganado mucha vistosidad. Además de a todo el equipo de gobierno, al equipo técnico de la obra, por supuesto a nuestras familias por aguantarnos…Y, muy especialmente, a los protagonistas de la obra pues, sin ser actores profesionales, se involucran en un proyecto que les exige mucha dedicación sólo porque su pueblo se promocione, suene y la gente venga a vernos. Se someten a muchísimas horas de ensayo: comenzamos leyendo los textos a finales del año pasado y cada vez les fuimos apretando algo más. Es un gran esfuerzo y han hecho un excelente trabajo siendo, además, muy disciplinados.

Todos los anteriores directores han apostado por el texto de Francisco Benítez ¿Qué tiene  la obra de Luis de Eguílaz para que tú te hayas decantado por ella? Bueno, no será del todo nuevo. La realidad es que poco a poco, en diferentes ediciones, se han ido añadiendo escenas del libreto de este año pues el Ayuntamiento tuvo conocimiento de que existía el texto de Luís de Eguílaz, tras el estreno de la primera edición. A mi manera e entender, la obra contaba con una serie de escenas pero adolecía de hilo argumental, de una historia que enganchara. He intentado buscar eso en esta edición, pero también que la vaquera cobrara más protagonismo en el relato. Así que ahora ‘La Vaquera’ y su intrahistoria se plantean desde el principio de la obra y la historia es narrada por uno de los personajes con pasado en la Finojosa.

No sé si te pesa eso de que “nadie es profeta en su tierra”. ¿Crees que será un hándicap en cuanto a la crítica de la representación? Me refiero a… ¿Piensas que va a exigírsete más? Así dice el refrán ¿no?… No sé si se cumplirá conmigo pero, la verdad, no me lo planteo pues si no, no lo haría. Yo he intentado hacer esto con muchísimo cariño, he trabajado con mucha ilusión con los actores, sin conflicto alguno con ellos y haciendo entre todos una piña. Lo que me interesa, lo que busco, es que el producto final sea de calidad. Porque si así resulta, la gente estará contenta y es que a la gente de Hinojosa le gusta el teatro y lo sabe valorar. Aunque “La Vaquera” es mucho más que una obra de teatro. La proyección que se hace del pueblo es enorme y la gente eso aún no lo ha valorado en su justa medida. Creo que es un producto que hay que aprovechar más. No digo que se hagan más representaciones, sino que la vaquera debería estar más presente en la programación cultural del pueblo cada año e incluso, el auditorio municipal, podría llamarse “Auditorio Vaquera de la Finojosa”.

Para terminar, ¿con qué retos te has encontrado? ¿Qué está siendo para ti lo más complicado? Lo más difícil es unir todo con un sentido. Los caballos, la fanfarria…Pues por muchos ensayos que hayamos hecho desde enero, hay cosas que no se pueden contrastar hasta que ensayamos en la plaza y lo vemos sobre el terreno. Lo complicado es evitar que se queden espacios en blanco porque es un obra muy dinámica en la que siempre están sucediendo cosas y todas tienen que ir corriendo con una agilidad que es la que estamos imprimiéndole estos días sobre el terreno.

Con gentes con tanto tesón como José Manuel seguro que “La Vaquera de la Finojosa” cuya VI edición verá la luz por fin hoy, no deja de ser un nuevo éxito mostrando cómo hay iniciativas que deben serlo y afianzarse siempre como auténticos proyectos de todo un pueblo.

La adaptación de un texto antiguo. La labor de Antonio Javier Cortés

José Manuel ha confiado la adaptación de la obra de Eguílaz en, como él mismo lo define, “un amigo de toda la vida”. Nos cuenta cómo Antonio Javier Cortés, también hinojoseño “escribe desde siempre y tiene, sin ser escritor, un talento innato”. El hándicap, “nunca había escrito teatro” aunque, en la práctica, no se ha notado demasiado: “Todo ha sido muy consensuado entre ambos. Sobre todo en escenas de Luís de Eguílaz que se han cambiado totalmente adaptándolo a nuevos personajes”. Y es que ellos, optaron por “Eguílaz, no sólo porque existiera este otro texto como alternativa, sino porque desde que nos pusimos a trabajar sentía que había que hacer una historia nueva”, nos cuenta José Manue para desvelar lo más complicado de la tarea de su también ayudante de dirección: “El texto de Luis de Eguílaz adoptaba maneras del siglo XV muy difíciles de entender… pero llega Cortés y lo adapta todo”. Una de sus principales aportaciones ha sido en el proemio de la obra donde “recogemos una visita histórica de la Reina Isabel con motivo de un conflicto de tierras. A ella la acompaña el Cardenal Mendoza, hijo del Marqués de Santillana y será él quien nos narre a todos la historia”.

 

Puedes ver la galería de imágenes del ensayo de la VI Edición de la Vaquera de la Finojosa en el siguiente enlace:

http://www.hinojosadelduque.es/galeria/ensayos-vi-edici%C3%B3n-vaquera-de-la-finojosa